El proyecto, encabezado por la investigadora y profesora del Máster en Tecnología y Calidad Agroalimentaria María José Frutos, busca optimizar los cultivos de la especia, monitorizar sus efectos fisiológicos en la salud e investigar sobre su sostenibilidad.
En la Escuela Politécnica Superior de Orihuela ha nacido un proyecto innovador entorno al azafrán y sus compuestos bioactivos, que pretende desarrollar alimentos funcionales y analizar sus efectos sobre la salud humana. El programa europeo Prima lo ha escogido con otros 27, de entre 362 proyectos presentados a la primera convocatoria, y lo ha dotado de una ayuda monetaria de 1.475.000 euros.
Las fuentes vegetales cada vez ganan más importancia en el panorama de la industria alimentaria, y el azafrán es rico en compuestos saludables, así que lo que pretende esta investigación es mejorar la calidad de la producción en las zonas rurales, a la vez que sus efectos saludables en el cuerpo humano.
La investigación sale ya de las fronteras nacionales, compartiendo trabajo con universidades de Argelia, Francia, Italia, Portugal y Alemania, que aportarán cada una las técnicas en las que están especializadas. Los resultados pretenden mejorar la innovación tanto de manera tecnológica como social, a través de fomentar la industria agroalimentaria.
Fotografía: Servicio de Comunicación UMH